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Formación

¿Debo formarme para utilizar un desfibrilador?

Realmente, no. Sin embargo… ¿Recuerdas aquello de que el saber no ocupa lugar? ¡Pues eso! Nunca está de más conocer la base de la reanimación cardiopulmonar (RCP) para que puedas utilizar un desfibrilador con las máximas garantías y, sobre todo, con la seguridad de que estás haciendo lo correcto. ¡La vida de una persona está en riesgo!

¿Te animas a conocer más sobre la RCP y sobre el uso de desfibriladores? ¡Te acompañamos!

La Reanimación Cardiopulmonar (RCP) es el proceso de primeros auxilios que se utiliza para reanimar un corazón que se encuentra en parada cardiorrespiratoria (PCR). Normalmente, la RCP se realiza mediante una serie de técnicas manuales que permiten que la oxigenación y el flujo sanguíneo vuelvan a sus niveles habituales y normales.

Los pasos a seguir para realizar una reanimación cardiopulmonar (general) son:

reanimación cardiopulmonar

  1. Comprobar el estado en el que se encuentra la víctima. ¿Respira? ¿Está consciente?
  2. Avisar a los servicios de emergencia (112).
  3. Comenzar el masaje cardiaco.
  4. Arrodíllate a su lado. La persona siempre deberá estar boca arriba con los brazos y las piernas alineados sobre una superficie rígida.
  5. Deja su pecho al descubierto.
  6. Inicia 30 compresiones torácicas en el centro del pecho. A un ritmo de 100-120 compresiones por minuto.
  7. Realiza dos insuflaciones con la vía aérea abierta. Es decir, comprobando que la lengua no impide el paso del aire.
  8. Continúa haciéndolo hasta la llegada de los servicios de emergencias o hasta que el paciente recupere la respiración.

Una vez que realizas estos pasos, si la víctima no responde, será el momento de pasar a la utilización del DESA.

Además, debes saber que existen dos tipos de Reanimación Cardiopulmonar principales:

  • RCP BÁSICA. Es la que debería conocer cualquier persona, ya que puede resultar imprescindible en cualquier momento.
  • RCP AVANZADA. Es la que se realiza por profesionales sanitarios formados y cualificados en este ámbito.

La reanimación cardiopulmonar (RCP) es una técnica para salvar vidas que se usa en situaciones de emergencia cuando una persona deja de respirar o su corazón deja de latir.

RCP EN ADULTOS

La RCP en adultos es aquella que se realiza en personas de más de 8 años. Por supuesto, es la más utilizada. Los pasos que te hemos mencionado anteriormente servirían para cualquier tipo de paciente.

Es primordial el ritmo con el que debes realizar las compresiones torácicas. En concreto, deben efectuarse 30 compresiones con un ritmo de 100 a 120 por minuto. También es importante tu posición: deberás colocarse de rodillas, al lado del paciente, enlazando tus manos y estirando los brazos. Después, tendrás que poner tu palma de la mano sobre su pecho y entrelazar la otra con los dedos.

RCP EN NIÑOS

La RCP en niños puede resultar algo más curiosa o distinta que la anterior. ¡Te hablamos de ella! La RCP infantil o en niños se divide según las edades de los niños sobre los que se realiza. 

RCP EN LACTANTES MENORES DE UN AÑO:

  • Golpeamos la planta del pie del bebé para comprobar si se encuentra consciente y respira.
  • Realizamos cinco ventilaciones desde nuestra boca sobre la boca-nariz del bebé. Es decir, tu boca deberá cubrir tanto la boca como la nariz del bebé.
  • Después, 15 compresiones y 2 ventilaciones boca a boca-nariz.
  • Las compresiones deben realizarse con tus dos pulgares o dedos índices, en lugar de con toda la palma de tu mano.

RCP EN NIÑOS MAYORES DE UN AÑO:

  • Comprobamos si el niño está consciente y respira.
  • Realizamos compresiones torácicas con una mano o con dos dedos, profundizando unos 4 o 5 centímetros sobre el pecho del pequeño.
  • Combinamos con dos insuflaciones.
  • El ritmo debe ser, asimismo, de 30 compresiones a un ritmo de 100 por minuto.

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